A URDANGARÍN TOLERANCIA INFINITA

Con Urdangarín la monarquía ha perdido puntos, y no tenía muchos. Ha caído en ella una mancha enorme que, además, se está extendiendo sobre el aceite en agua. Frecuentemente aparecen nuevos descubrimientos de los trinque del yerno regio que le hicieron multimillonario por generación espontánea y de cuya rápida metamorfosis su esposa, la infanta Cristina de Borbón, se dice no fue consciente.

¡Que cosas tan… raras hay que oír! Últimamente se ha publicado una noticia más que de manera rotunda prueba encontrarse involucrada en los… “””negocios””” de su cónyuge. Acaba de publicarse que los duques de Palma en 2004 presentaron a Hacienda 233.000 euros en nóminas falsas mediante las cuales declararon 169 euros en lugar de 77.000. La Agencia Tributaria expone que ello lo han repetido en los años siguientes. Se trata de la empresa Aizoon propiedad del matrimonio al 50%. Si de esta copropiedad no era consciente la infanta, ¿lo será ahora de esta actuación?

Parece que la realidad podrá abrirse paso.

Es una buena baza para el sindicato Manos Limpias cuya abogada Virginia López Negrete tiene presentada demanda solicitando se la llame a declarar como imputada. Resulta increíble para todo español y extranjero capaz de vez más allá de sus narices que desde un principio no haya sido imputada. Y partiendo, desde luego, de la premisa de que el artículo 14 de la Constitución proclama la igualdad ante la ley, sin discriminación alguna; bueno, en nuestra especial monarquía con excepción del rey, la cual no consigna en esta parte. Esperemos que este artículo no se quebrante como tantos otros. Por ejemplo, lo hace en el capítulo tercero: “De los principios rectores de la política social y económica”, artículo 39, referente a la protección de la familia, cuyo punto 1 dice literalmente: Los poderes públicos aseguran la protección social, económica y jurídica de la familia. Sí, a la vista lo tenemos. Ya he dicho en un escrito anterior cómo el Gobierno actual la está protegiendo.             

Está cayendo en picado la mentira.

Ya se entiende como incierto que el rey prohibiera a Urdangarín que continuara robando, Según la declaración de un testigo, lo que acaecido es que el conde de Fontán le dijo: haz lo que quieras pero que tu nombre no aparezca. Y continuó haciendo de las suyas. Viéndoles en peligro el monarca les hizo poner tierra por medio, que en este caso fue agua. Evidentemente no era el adecuado papel que debió desempeñar. Como a la vista de que continuamente van saliendo casos a cual más vergonzosos, tampoco se explica que la Zarzuela continúe impasible, protegiendo pasivamente sus hazañas. En cierto medio de información de la Corte –que de alguna manera vuelve a ser  la de los milagros- se preguntaban qué tiene que hacer el matrimonio Urdangarín-Borbón para que le excluyan de la Familia Real. Añadiendo esta otra pregunta: ¿Qué están temiendo de Urdangarín, qué está temiendo su majestad para no echar a este sinvergüenza y a su señora de la Familia Real. Porque esta sociedad no es la de sin ánimo de lucro.   

      

El trono se tambalea.

Al no poder don Juan Carlos disuadir a su hijo de que se casara con una señora divorciada expuso a cierta persona en los preliminares de boda: Este se carga la monarquía. La verdad es que toda la familia, parientes incluidos, contribuyen a ello. Podemos leer que hasta doña Pilar de Borbón y Borbón ha ayudado a Urdangarín a… “””ganar””” dinero. Por otra parte, toda la parentela se ha beneficiado de la Corona, y no ya para pane lucrando, ganarse el pan, sino para conseguir  mucho más que cubrir las necesidades básicas. Aparte de algún libro en papel, en la web podemos ver la tajada que cada uno ha sacado, la ventaja de estar emparentado con el rey. Y quedamos estupefactos del extremo a que la han llevado con la anuencia de él, y a veces no sólo con el consentimiento sino por su mediación. Hay algo que se llama tráfico de influencias y que el DAE define así: Utilización abusiva o ilegal de la posición social o política con el fin de conseguir beneficios o ventajas. Al rey la Constitución le hace irresponsable, pero, pese a ello, no se elimina su responsabilidad, existe en la misma, únicamente se pasa o otra persona, y en su demostración paso seguidamente a transcribir íntegro, el artículo 64:

1. Los actos del Rey serán refrendados por el Presidente del Gobierno, y, en su caso, por los ministros competentes. La propuesta y el nombramiento del Presidente del Gobierno, y la disolución prevista en el artículo 99, serán refrendados por el Presidente del Congreso.
2. De los actos del Rey serán responsables las personas que los refrenden.

 

De gran parte, pues, de lo que se le imputa a don Juan Carlos fue culpable la tolerancia de los Gobiernos que se han sucedido; “tanto monta, monta tanto” el PP como el PSOE. Tuvieron tolerancia infinita, como ahora él la está teniendo con su yerno. Puede deberse esta improcedente tolerancia ilimitada a que ve a punto de caer la Corona, tanto más siendo implicada su hija, lo que ya es imposible tapar.

Consentimiento unánime en la familia.

Hay quien sostiene que el príncipe Felipe no ha tenido arte ni parte en el ilícito enriquecimiento de su cuñado y de su hermana. Craso error, salvo que tal idea encierre mentira consciente en tendencia a defender la institución monárquica. Simpatías o antipatías aparte, lo cierto es que está involucrado a la trama Urdangarín. Que acuda, por ejemplo, a Internet y, por ejemplo también, a la página titulada “El príncipe Felipe vinculado a la trama Urdangarín”. Leerá que empresas vinculadas a la Fundación Príncipe de Gerona –gestionadas por Felipe de Borbón y su esposa Letizia Ortiz- hicieron grandes donaciones al duque de Palma. Así lo ha denunciado la formación política Solidaridad Catalana por la Independencia. El diputado Toni Strubell sostiene que la sociedad catalana debería saber las razones que hay detrás de la “generosidad” mostradas por estas empresas de la Fundación hacia Urdangarín. He aquí las empresas y su generosidad:

Telefónica 703.852 €, Albertis 116.000 €, Repsol 237.800 €, Gas Natural 41.700 €, BBVA 502.621 € y las bodegas Miguel Torres 41.760 €.

Sencillamente vergonzoso. ¿Pero qué se propone esta familia? Esto es algo más que reinar, y, desde luego, no reinar como, de mucho tiempo a esta parte, ha de hacerse: siendo modélico o aparentándolo. Ya preocupa poco serlo y ni siquiera aparentarlo; bueno, el rey pidió disculpas pero sin estar dispuesto a dejar a Corina. Por su edad dejará de ser un donjuán, sólo por la edad, que no por la ejemplaridad que se exige a toda Familia Real. Y vigilada en ello por el rey. ¡Poco vigiló a su yerno e hija! Y ahora viene el miedo y el disgusto.

Siempre la mentira, el engaño, por parte de ellos y/o de cierto sector de la prensa.

Tenemos a la vista que el príncipe Felipe se llevó siempre bien con su cuñado, incluso en el último veraneo todos en familia cuando ya se vislumbraba peligro por el caso Palma Arena, ha sido necesario que un juez se haya atrevido a encartarle como presunto delincuente para que deje de relacionarse con él y se manifieste a los cuatro vientos que el príncipe no quiere saber nada de Urdangarín ni de su hermana Cristina. Tarde se ha dado por enterado. Para guasa de las guasas se dan comentarios como este: En la familia del rey, Iñaki Urdangarín ha dejado de existir. Parece que salvo las conversaciones íntimas al duque ni se le nombra y mucho menos se comenta los desmanes que día sí y día también aparecen en la prensa. Bueno, esto es “hablar por hablar”. ¡Ya lo creo que comentarán la delictiva conducta que el juez va descubriendo! Ahora tiemblan de miedo, el rey por temor a no acabar sus días como tal, y Felipe porque ya ve dificilísimo la sucesión. (Ya de por sí lo era a la altura histórica que estamos). Abrigaron siempre la absoluta confianza de una impunidad total. Ésta se ha roto y el hermetismo les resulta ya dificultoso.

MANUEL LÓPEZ PERALTA