Bajar los sueldos es la solución para luchar contra la crisis. Para acabar con la mayor tasa de paro de la historia, para salir de la crisis, el gobernador del Banco de España, Fernandez Ordoñez tiene la receta, por supuesto neoliberal; hay que bajar los sueldos.
La bajada de los sueldos, el recorte de los salarios es con fundamento una realidad a la que se van a enfrentar los trabajadores que aún conservan el puesto de trabajo. Y después vendrá el recorte del subsidio de paro.
Un gran descubrimiento para un alto cargo del Banco de España, que de moral y ética tambien anda cortito. Podría haber dicho incluso que hay que bajar el salario mínimo interprofesional, ya que es una obstrucción para que un empresario pueda explotar libremente a los trabajadores. Ahora legalmente ningún empresario puede
contratar a un trabajador, ni ningun trabajador puede admitir un contrato que no respete el salario mínimo interprofesional, y esto es perjudicial para la crisis. No digo broma, ya en noviembre escribí un artículo sobre la optica leoliberal del
Salario Mínimo.(salario minimo interprofesional).Yo recomendaria leer un artículo que escribí sobre noviembre: como acabar con la crisis en el 2011.
El Gobernador del Banco de España piensa que el problema de lo cinco millones de parados tiene mucho que ver con los altos sueldos de los trabajadores, por lo que considera que bajar los sueldos elimina el problema del desempleo. Ordoñez ha dado a conocer su receta para acabar con la enorme tasa de desempleo:
«Bastaría con que los empresarios pudieran, al igual que en otros países desarrollados, ofrecer empleos con salarios acordes con su productividad a esos millones de desempleados, y que estos pudieran [...] decidir sobre unas ofertas que hoy los empresarios españoles ni siquiera pueden plantearles debido a la rigidez de nuestras singulares normas»En otras palabras o el trabajador engrosa la lista de los pobres a través del desempleo sin encontrar trabajo, o la engrosa a través del trabajo, reduciendosenos los sueldos. Siempre respetando los niveles de beneficios por debajo de los que los empresarios no están dispuesto a contratar.
No me voy a escandalizar, pues en éste país como aún no hemos quemado a nadie, se dicen sandeces a diario y después de soltar la tonteria mas burra, se desayuna un café con churros y se queda uno más que relajado. Quizás seria cuestión de ir pensando a quien quemar primero, veriamos si se siguen haciendo conjeturas con los trabajadores tan gratuitamente como a diario podemos leer en la prensa.
Bien mirado, en lugar de recortar aún mas los sueldos, tambien se reduciria la tasa de desempleo si los empresarios y los banqueros de éste país estuvieran de acuerdo en que hay que ganar un poco menos. La época de los grandes beneficios, de los grandes rendimientos ha pasado. No solo los trabajadores tienen que apretarse el cinturon sobre sus calarios mil euristas.
Si el señor Fernandez Ordoñez no fuera un sinvergüenza quizás hubiera cambiado su dircurso y hubiera pedido a los banqueros que dieran créditos a las pequeñas empresas a unos intereses mas en línea con los tiempos que corren, que los empresarios de éste país dejaran de perseguir los grandes beneficios y se conformaran con menos rendimientos, que las grandes fortunas no defraudaran a Hacienda y que se subiera los impuestos a los que más deben a la sociedad. En resumen hubiera dicho que la época de las vacas gordas ha terminado incluso para empresarios, inversionistas, banqueros, gobiernos y sistema en general.
El señor Fernandez Ordoñez si no fuera un golfo, deberia haber pedido al gobierno que haga números y disminuya realmente sus gastos estructurales, que se elimine el Senado, que se cambien las condiciones salariales de ministros, exministros, consejeros, que cada cual pague sus vicios y que con todo el dinero que se ahorre hiciera una politica de gasto público inteligente. Deberia haber reprendido a los eurodiputados, otros golfos, y haberles avergonzado publicamente por querer disfrutar de unos privilegios que hoy en dia no es posible.
El señor Fernandez Ordoñez si no fuera un enano mental, deberia haber criticado las enormes primas y fortunas con la que se retribuyen a los altos cargos de las grandes empresas y los bancos, primas millonarias.
Pero dado qué es portador de éstos defectos y posiblemente muchos más, hay que seguir atacando al débil y pregonar maximas neoliberales, hay que bajar los sueldos, para que los empresarios contraten a más trabajadores y sigan obteniendo las tasas de beneficios que han obtenido en tiempos de bonanza.
Mientras tanto, el Ordoñez cobra una nómina de 165.000 euros al año y cuando deje su puesto de trabajo cobrará 132.000 euros anuales durante dos años.
Que estos puestos ocupados por idiotas morales no olviden que el problema también es que los grandes empresarios, los ricos, los banqueros, quieren seguir manteniedo sus cohes de alta gama, sus chalets de vacaciones de dos millones de euros, sus vacaciones a paraisos millonarios, sus gustos por las joyas, sus queridas millonarias etc. Esto tambien tendrá algo que ver, digo yo.
El problema del paro no son los sueldos y me repito, el problema es que aún no hemos quemado a nadie en este país.
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