Un funcionario robó al CSIC 1,6 millones de Euros.

Un funcionario robó al CSIC 1,6 millones de Euros, entre 1999 y 2010 (presuntamente). En ésta ocasión la autoria excepcionalmente no está relacionada con la casta politica, no tiene nada que ver con financiación irregular de ningún partido, ni con trajes y caros regalos que paguen favoritismos de políticos, ni comisiones y pagos a altos cargos de instituciones financieras premiando su aportación a la burbuja inmobiliaria. Esta vez el dinero descansa bajo la tutela de un trabajador, funcionario de profesión.

Continuamente leemos noticias de corruptelas políticas, de ERE´s en Andalucia, de caso Gürtel, de Camps, recortes y robos a funcionarios, trabajadores y jubilados  y en este tiempo nunca he podido leer que el fraude, robo o apropiación indebida se haya producido en distinto sentido al que se ha venido dando. La autoria siempre ha correspondido a políticos y entornos de politicos, bancos o grandes empresas, hasta hoy,  en que la autoria es la de un funcionario. Es un delito y por tanto punible y penado por ley, no justificable, pero sinceramente he pensado ¡por fin! en este caso la tortilla ha dado la vuelta. El robo se ha realizado por una persona de a pié, un funcionario, un trabajador, uno de tantos a los que le han reducido el suelto, le han aumentado la edad de jubilación, le han reducido la pensión, le han pedido que se sacrifique por los mercados, es presumiblemente un trabajador màs, quizás un futuro cliente de la cola del INEM.

El presunto robo se ha producido durante varios años por un funcionario responsable de pagos de subvenciones de fondos europeos para investigaciones.Parece ser que el sistema ha consistido en detraer pequeñas cantidades de cada uno de los desembolsos realizados con cargo a  estos fondos europeos.Estas pequeñas cantidades se supone que han llegado a sumar los 1,6 millones de descuadre.

El funcionario se encuentra en paradero desconocido. El montante sustraido supone una importante cantidad pero  irrisoria si la comparamos con los millones de euros que en el mismo periodo se pueden valorar los numerosos delitos, tramas y corrupciones relacionadas con  la clase política y su entorno.