Con Fraga no muere el franquismo

Manuel Fraga Iribarne ha muerto

La muerte de Manuel Fraga ha producido numerosas muestras de apoyo a un gran político. A estos que piensan en un Fraga democrático, padre de la Constitución, del politico tierno en la intimidad, como también he escuchado,  siento decirles que no, no ha muerto un demócrata, ha muerto un político, quizás tan trabajador como déspota, e inteligente, tan defensor a ultranza de la democracia como en un principio lo fué del régimen de Franco. No obstante defiendo tambien el derecho de todos nosotros a evolucionar en nuestras creencias y en nuestros ideales. 



Hay quienes consideran que con Fraga muere el último recuerdo del Franquismo; craso error, no se puede hablar de la última herencia franquista en le figura de Fraga Iribarne, aún queda  la Monarquía que Franco nos legó.

Cuando una persona muere hay que hacer justicia a su figura en la historia, hay que ponderar lo que hizo en vida, pero es mala costumbre subir a los pedestales de la bondad, el amor y de la libertad. Fraga era un hombre con sus errores y sus virtudes y como tal no debe ser su nombre tan ensalzado como parece ser lo está siendo.

Quizás no hubiera escrito estas líneas si todos aquellos que han elogiado  su nombre hubieran sido mas prudentes en las declaraciones públicas y es que resulta que Fraga Iribarne no era todo pundonor, honradez, democracia. Mejor es callar y que los libros de historia hablen, pero decir tonterias por decir, no me parece justo, ni lógico, aunque para ser justos reconozcamos que lo que se está haciendo y hablando en estos tiempos en nombre de la democracia sea un burdo engaño.

Con Manuel Fraga muere la figura del político de la derecha pura y dura,  inteligente, tan inteligente que supo servir a una dictadura y que pudo vivir de una democracia. Quizás desde ésta perspectiva debiera ser de admirar, pero viene a mi mente el refranero español, en tierra de ciegos el tuerto es el rey. Y Fraga fué un político avispado y hasta quizás inteligente, pero no hay que olvidar que la casta política española tiene más de ciega y burda que de inteligente y por tanto los años que ha vivido el fallecido de la sombra de la democracia tampoco es producto de una gran inteligencia, sino más bien de unos torpes políticos y de un oportunismo habilmente manejado, mientras que los años en los que vivió sirviendo los ideales del Movimiento si que pueden ser debidos a méritos propios.

La calle que un su día fué de Manuel Fraga Iribarne ahora es de los mercados financieros así es que tampoco hemos avanzado mucho de aquellos años de la España oscura y dictatorial,  a la España europea. Solo que por entonces se llamaba dictadura y ahora a lo mismo le llaman democracia liberal, quizás sea por ello que éste ministro de Franco supo vivir en ambos bandos.

De todas formas de Don Manuel Fraga Iribarne que se sepa no existe ninguna historia oscura, ni crimenes políticos que se sepa, sirvió al franquismo y justificó sus crímenes, aunque en sus últimos tiempos representaba al grupo reformista del régimen.

Pienso que Don Manuel Fraga, a diferencia de Blas Piñar o Girón,  fué una figura dotada de una gran inteligencia que supo adaptarse a las nuevas circunstancias de la transición, por sus ideas no contrarias a la reforma.

Fué Catedrático de Derecho Político y Derecho Constitucional, claramente líder de la derecha política y como tal actuó fundando Alianza Popular. En la dictadura de Franco fué ministro de información y turismo y Embajador en Londres. En la transición Vicepresidente y ministro de Gobernación (1975-1976) y fundador de Alianza Popular. Sirvió al régimen del general Francisco Franco y acabado éste defendió sus ideas desde lider de la derecha española.

En la última etapa del franquismo Manuel Fraga apostaba a  una pequeña reforma apeprturista del régimen. De hecho Alianza Popular admitia una democracia pero en orden y con autoridad que frenara las fuerzas socialistas marxistas.

Manuel Fraga defendía unos ideales políticos y quizás no ha sido completamente herencia del régimen franquista, al menos no tanto como pudiera serlo la institución de la Monarquía representada por el rey Juan Carlos. Es por tanto necesaria un nuevo Referendum que defina a éstas alturas y aclare para la historia si realmente la Monarquía es o no   legado del franquismo.

En recuerdo de Don Manuel Fraga Iribarne y dedicado a los que ensalzan su persona, su talante democrático y su participación en la Constitución.





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